Trabajar como Fotógrafo de niños es una de las cosas que más me reconforta en esta vida ya que te permite trabajar sin que se te quite la sonrisa de la cara en ningún momento porque tienes la oportunidad de tener delante de la cámara las situaciones más simpáticas y espontaneas que te puedas imaginar.
En esta ocasión la sesión que os traigo es un trabajo como Fotógrafo de moda infantil donde se siguen las reglas de la fotografía de moda pero claramente modificadas a la dinámica de trabajar con niños, con sus tiempos de descanso propios y sus formas para captar la atención, y es que no tenemos que olvidar que en una sesión de moda infantil no estamos trabajando con modelos profesionales sino con niños y niñas que se toman la sesión de fotos como algo divertido en un clima más lúdico que profesional.

Maria es una niña que tiene 5 años aunque ella ya está en la etapa que prefiere decir que tiene casi 6 😉 le encanta sentirse princesa y verse guapa en las fotos con estas bases se planteo esta sesión en la que se intenta reflejar en la fotografía de moda infantil una imagen de una niña pero si excesiva carga infantil ya que a partir de los cinco años los niños empiezan a agradecer que nos dirijamos a ellos con menos gestos infantiles.